Title: Lunaz revoluciona el clásico Range Rover Safari con un toque eléctrico

Lunaz, una casa de afinación personalizada, ha dado nueva vida a este clásico Range Rover Safari descapotable mediante la sustitución del antiguo motor V8 de 3.9L por dos motores eléctricos, después de más de 5,000 horas de desarrollo. Sin embargo, este proyecto va mucho más allá de un simple cambio de motor.

El equipo de Lunaz se inspiró en el Range Rover convertible que aparece en la película de James Bond “Octopussy” de 1983 y conducido por Roger Moore. Partiendo de un modelo wagon de dos puertas de 1983, el equipo de Lunaz no solo cortó el techo del Ranger, sino que también reforzó el chasis del descapotable para mayor rigidez, instaló un nuevo sistema de suspensión con amortiguadores ajustables y configuraciones de muelles personalizadas, además de mejorar los frenos con discos más grandes y pinzas de seis pistones en el frente (cuatro en la parte trasera) para detener el vehículo más rápido.

En el interior, el Range Rover Safari eléctrico de Lunaz cuenta con una configuración de asientos 2+2 tapizados en cuero azul claro combinado con un material textil resistente al agua en las franjas tejidas en el centro de cada asiento. La paleta de colores del interior fue cuidadosamente elegida para que coincidiera con el acabado exterior en “Maya Blue”, mientras que los materiales seleccionados por Lunaz permiten a los compradores no preocuparse demasiado por la lluvia durante su próximo safari africano.

Estos modelos eléctricos del Range Rover Safari, hechos a mano por Lunaz y con más de 5,000 horas de investigación y desarrollo en la conversión, no serán baratos. Sin embargo, al menos ofrecen asientos con calefacción, un panel de nogal Mocca y compatibilidad estándar con Apple CarPlay/Android Auto.

Aún no se ha revelado el precio, la autonomía ni los tiempos de carga.

Opinión de Electrek:

Como mencioné en otros artículos sobre “clásicos actuales”, el problema con los automóviles clásicos como el Range Rover original siempre ha sido mantenerlos en la carretera. Sus motores se desgastan, los embragues necesitan ser reemplazados, las líneas de vacío y las bujías y filtros de aceite se deterioran con la edad y se vuelven imposibles de encontrar a medida que se agota el inventario NOS. Además, existe el problema de las emisiones: un clásico de cuarenta años nunca será tan limpio como un automóvil nuevo, incluso uno de combustión interna.

Es por eso que estos proyectos de tiendas como Lunaz nos siguen fascinando. Toman todo lo que era genial de los viejos íconos y los acercan, quizás no completamente a la era moderna, pero lo suficiente como para disfrutar de ellos.

Lunaz, una casa de afinación personalizada, ha transformado un clásico Range Rover Safari descapotable mediante la sustitución del motor por dos motores eléctricos. El equipo de Lunaz se inspiró en un modelo convertible que apareció en la película de James Bond “Octopussy” de 1983. Además de cambiar el motor, se realizaron modificaciones en el chasis, la suspensión y los frenos para mejorar el rendimiento del vehículo.

El interior del Range Rover Safari eléctrico de Lunaz cuenta con asientos tapizados en cuero azul claro y material textil resistente al agua. La paleta de colores del interior está diseñada para combinar con el acabado exterior en “Maya Blue”. Estos modelos ofrecen asientos con calefacción, un panel de nogal Mocca y compatibilidad estándar con Apple CarPlay/Android Auto.

Aún no se ha revelado el precio, la autonomía ni los tiempos de carga de estos modelos.

Opinión de Electrek: Estos proyectos de tiendas como Lunaz son fascinantes ya que permiten disfrutar de los clásicos automóviles sin preocuparse por los problemas de mantenimiento y las emisiones que suelen presentar.